CORTINA DE HUMO
Un asiento vacío
cada dos
El
24 de marzo de 1976 es derrocado el gobierno de María Estela Martínez de Perón
a manos de las fuerzas militares , poder absoluto para ellos , estado de sitio,
violación de los derechos humanos, terrorismo de estado, presos políticos,
muerte y desaparición a mil de personas , apropiación sistemática de recién
nacidos e innumerables crímenes de lesa
humanidad. Finalizando el 10 de 1983 con la asunción de Alfonsín como
presidente, volviendo así la democracia a nuestro país.
En
medio de esta etapa, considerada la época más nefasta y sangrienta de nuestra historia,
hubo un mundial, Argentina 1978.
El
campeón, Argentina, en una épica final contra Holanda. El goleador , Mario kempes, al que
irónicamente apodaban “ el matador “ ,
por liquidar a cualquier portero que se le cruce , aunque los verdaderos
matadores estaban en la calle , vestidos
de verde , asesinando y torturando personas , personas reales , de carne y
hueso ; kempes , era solo un gran goleador.
La
final se jugó en el estadio “monumental”, a menos de un kilómetro de alguno de
los centros de detención y tortura más grandes de la dictadura.
En
una plaza, las madres de desaparecidos pidiendo justicia por los suyos, en otra,
miles de Argentinos festejaban el logro mundial.
Una cortina de humo que nos
mostraba una parte de la historia. Un logro deportivo que distraía al mundo,
entregando una realidad ficticia
En
la final habían más de 60.000 hinchas, 60.000 almas, mientras que otras 30.000 sufrían, morían y desaparecían.
Juan
fajre
TWITTER: @juanfajre
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